Acantilados de Los Gigantes – Monumento Natural en Tiempo Real
preciosos acantilados, un icono de Tenerife

Cámara web los gigantes: vistas naturales en directo
Hay lugares que se recuerdan por una fotografía. Los Gigantes se recuerdan por una sensación: la de sentirse pequeño frente a una pared de roca que parece tocar el cielo y hundirse en el océano. El sonido del Atlántico, el olor a salitre, el sol rebotando en el basalto oscuro y las vistas espectaculares que regalan sus acantilados imponentes hacen de este lugar un cuadro en movimiento, en pleno corazón de las islas canarias.
Una muralla de basalto que cae al Atlántico
En el noroeste de Tenerife, el Macizo de Teno se desploma en una sucesión de riscos verticales que superan con facilidad los 300 metros y alcanzan en tramos puntuales alrededor de 600 metros, creando una de las paredes costeras más sobrecogedoras de Canarias. La línea de costa se tensa durante kilómetros, desde la zona de Santiago del Teide hasta la remota Punta de Teno. A pie de acantilado –sí, acantilados majestuosos que forman el paisaje– el fondo se precipita otros 30 metros bajo el mar. Una frontera vertical entre isla y océano que invita también al submarinismo en fondos volcánicos.
La escala se entiende al llegar a la pequeña Playa de Los Guíos y levantar la vista. El pueblo, el puerto y las barcas parecen miniaturas. Es el mejor preludio para comprender por qué este litoral se convirtió en emblema del municipio de Santiago del Teide, en postal repetida y en escenario constante de vida marinera, además de ofrecer panorámicas de canarias de gran belleza.
Cómo se hizo esta pared: del Mioceno al presente
El origen de Los Gigantes es volcánico, y su historia está escrita en capas. Hace millones de años, cuando el Teide aún no existía y Teno dominaba el territorio, delgadas coladas de lava basáltica surgieron por fisuras y se apilaron una sobre otra. Entre ellas quedaron atrapadas escorias y depósitos piroclásticos. En algunos niveles, el enfriamiento formó columnas prismáticas que hoy asoman en la pared. Con el tiempo, diques y sills de composición más rica en sílice cortaron esas secuencias, reforzando el armazón.
Luego llegó el escultor incansable: el Atlántico. Oleaje, cambios térmicos, viento, lluvia torrencial ocasional. La base se vació a mordiscos y la pared retrocedió sin perder su verticalidad. De ahí que el perfil actual conserve ese aspecto de muralla recién cincelada, haciendo juego con las acantilados que se alzan con fuerza. Pequeños desprendimientos siguen ocurriendo, prueba de que la geología está viva. El resultado es un paisaje joven en apariencia, aunque su historia se remonta al Mioceno tardío.
Datos que impresionan
- Altura predominante: 300 a 600 m
- Profundidad submarina inmediata: unos 30 m
- Horas de sol anuales: más de 300
- Precipitación media anual aproximada: 200 a 220 mm
- Temperaturas habituales: 17 a 28 °C la mayor parte del año
Vida que se agarra a la roca
Lo que parece puro mineral alberga un mosaico de vida adaptada a la aridez y al salitre. En las repisas encaladas por el sol, el matorral xerófilo canario dibuja manchas de verde: tabaiba dulce y amarga, el inconfundible cardón canario, agaves y aloes. En grietas húmedas reaparecen helechos y vestigios de laurisilva, un recuerdo botánico de climas más húmedos.
La fauna sorprende. Entre bloques de roca asoma el lagarto gigante de Tenerife, Gallotia intermedia, un endemismo valiosísimo redescubierto en los noventa y hoy protegido. En la cornisa anidan gaviotas patiamarillas, y en el agua se cruzan pardelas, cormoranes y, con suerte, delfines y calderones tropicales. Desde las alturas de los acantilados se pueden apreciar vistas espectaculares que unen la fuerza de la roca con el azul del mar, conformando un corredor biológico de primer orden.
El mar como patio de juegos
Los Gigantes invita a entrar al agua. La costa no regala largas lenguas de arena, pero compensa con calas volcánicas y fondos vibrantes, ideales para actividades como el snorkel, el submarinismo y el paddle surf. Las aguas permiten disfrutar de increíbles vistas en tiempo real, sobre todo si se practica el submarinismo en los fondos de lava con arcos, cuevas y arenales oscuros.
- Snorkel y buceo: fondos de lava con arcos, cuevas y arenales oscuros. Escuelas con salidas desde el puerto.
- Kayak y paddle surf: remar bajo la pared impresiona. La ruta hacia el entorno de Masca es un clásico que también favorece el senderismo costero.
- Avistamiento de cetáceos: catamaranes y semirrígidas salen a diario. Es una de las franjas más activas del archipiélago para ver delfines y calderones en libertad.
- Motos de agua y pesca recreativa: actividades reguladas, con operadores con base en Los Gigantes.
El mar es escenario y también oficio. A pie del muelle se mezclan el turista recién desembarcado del barco con el marinero que revisa cabos, mientras se puede apreciar el tiempo en canarias único que equilibra la fuerza del océano con la tranquilidad de las playas de canarias.
Playas volcánicas a mano: dónde extender la toalla
Tres arenales concentran la mayor parte del baño y el paseo en esta franja occidental. Estas playas de canarias destacan no solo por su arena volcánica sino también porque ofrecen un perfecto marco para disfrutar del turismo en canarias:
| Playa | Tipo de arena | Servicios | Ideal para | Enlace |
|---|---|---|---|---|
| Los Guíos | Arena negra con grava | Socorrismo, duchas, lavapiés, acceso fácil | Familias, primer baño, fotos con los acantilados | Playa los Guíos |
| La Arena | Arena volcánica muy fina y oscura | Paseo marítimo, restauración, hoteles | Día completo de playa, atardeceres | Playa La Arena |
| Playa Chica | Calita urbana y protegida | Entorno recogido, ambiente local | Snorkel tranquilo, baño sin prisas | Playa Chica |
En marea calma, los charcos naturales de la zona regalan baños de película. Conviene respetar siempre la señalización y las indicaciones del personal de playa.
Rutas y miradores que amplían la mirada de la webcam de Los Gigantes
Los Gigantes se disfruta desde abajo y desde arriba. La perspectiva cambia y el paisaje crece. Además de los habituales recorridos, el senderismo por los caminos cercanos ofrece un contacto directo con la naturaleza y la sensación de inmensidad que otorgan los acantilados circundantes.
- Paseo por el puerto y la Playa de Los Guíos: imprescindible para “tocar” la pared con la vista.
- Miradores de carretera hacia Teno: pequeñas paradas con vistas diagonales del acantilado y panorámicas de canarias que quitan el aliento.
- Masca: el caserío colgado en el barranco es un icono telúrico. Mira el entorno desde esta webcam de Masca, en Buenavista del Norte.
- Cañadas del Teide: el universo de coladas, pumitas y lavas cordadas a más de 200 m regala la otra mitad geológica del relato. Puedes asomarte en directo a Cañadas del Teide (La Orotava).
Santiago del Teide también guarda un pequeño tesoro urbano. El casco histórico conserva fachadas tradicionales, patios y la escala amable de los pueblos agrícolas canarios.
Historia viva: de menceyes, roquedales y turismo
Antes de que la carretera acercara el litoral, estas costas pertenecían al menceyato aborigen de Adeje. Quedó toponimia guanche en barrancos y degolladas, y una memoria oral que habla de gigantes en la isla, más metáfora de la geografía que leyenda personificada.
Durante siglos, la vida giró alrededor de la agricultura de subsistencia y la pesca ocasional, con muy poca presencia humana a pie de risco. Se cuenta que en 1797, ante intentos de incursión por mar, los vecinos desde lo alto arrojaron piedras para disuadir a embarcaciones extranjeras. Historias de costa áspera.
El gran giro llegó a mediados del siglo XX. La carretera abrió paso, llegó el agua corriente y con los sesenta aparecieron los primeros viajeros que buscaban sol y naturaleza intacta. En 1973, la inauguración del Hotel Los Gigantes consolidó la vocación turística, impulsando el turismo en canarias. Muchos pescadores y agricultores pasaron a guiar, a pilotar barcos de excursión o a levantar restaurantes. Los riscos siguieron ahí, pero su silueta comenzó a aparecer en folletos, postales y más tarde en miles de perfiles de redes sociales.


