Playa San Telmo – Corazón de Puerto de la Cruz en Tiempo Real
San Telmo es una magnífica playa lungo el paseo

Explorando playa san telmo: un paraíso marítimo
La costa norte de Tenerife tiene rincones que se quedan grabados en la memoria. San Telmo, ubicado en el emblemático barrio de San Telmo, en pleno Puerto de la Cruz, es uno de ellos. Un balcón de lava frente al Atlántico, un paseo que se recorre sin prisa y una pequeña playa urbana donde el rumor de las olas acompaña cada paso. Incluso desde casa se puede sentir su latido, gracias a las cámaras en vivo playa San Telmo que enfocan el litoral y permiten ver el tiempo en playa San Telmo con una vista en tiempo real que enamora a cualquiera. Basta una mirada para entender por qué tanta gente vuelve, ya sea para disfrutar de las playas o para experimentar el turismo en Canarias a través de sus panorámicas de Canarias.
Dónde está y cómo es su costa
San Telmo se sitúa en el corazón del Puerto de la Cruz, junto al paseo marítimo que conecta el casco turístico con Martiánez. Es un tramo urbano muy querido por residentes y visitantes, con bancos, miradores y accesos cómodos al mar. La playa en sí es pequeña, de arena negra volcánica y cantos rodados, protegida por salientes rocosos que moderan el oleaje en marea baja. En las cercanías, la playa de Buenos Aires complementa la oferta costera, ofreciendo un contraste único que se suma a la diversidad de playas de Canarias.
La geología manda. El basalto forma plataformas naturales y charcos que se llenan y vacían con el pulso del océano, creando pequeñas piscinas donde refrescarse cuando el mar está tranquilo. En días de mar de fondo el espectáculo es doble: olas potentes rompen a pocos metros y levantan espuma que perfuma el aire. La esencia del litoral recuerda, en cierto modo, a la tranquilidad de Sant Elm, haciendo eco en el alma de los visitantes.
A pocos pasos aguardan otros escenarios imprescindibles: la Playa Martiánez, el conjunto de lagos de César Manrique, el muelle pesquero y la Plaza del Charco. Todo conectado a pie, y además repleto de actividades en San Telmo que invitan a explorar cada rincón. Todo al alcance de una caminata marina que invita a detenerse cada poco.
Clima amable y mar siempre templado
La costa de San Telmo disfruta de un clima subtrópico suave con lluvias escasas e irregulares, típico del tiempo en Canarias. Los registros históricos de Puerto de la Cruz hablan de una media anual cercana a 14 °C y unos 307 mm de precipitación al año. Los meses secos se notan y los más húmedos llegan en invierno, con picos en diciembre.
A continuación, un vistazo mes a mes que ayuda a planificar:
| Mes | Temp. media (°C) | Prec. promedio (mm) |
|---|---|---|
| Enero | 9.7 | 32 |
| Febrero | 9.4 | 34 |
| Marzo | 10.8 | 37 |
| Abril | 12.2 | 26 |
| Mayo | 14.3 | 17 |
| Junio | 17.1 | 15 |
| Julio | 19.1 | 16 |
| Agosto | 19.4 | 12 |
| Septiembre | 18. | 12 |
| Octubre | 15.2 | 31 |
| Noviembre | 12.2 | 36 |
| Diciembre | 10.8 | 39 |
El mar, en cambio, mantiene una calidez constante. La temperatura del agua ronda 20.1 °C en invierno y sube a 22–23 °C en verano, con una temporada de baño amplia que se prolonga de abril a enero. Esta estabilidad convierte a San Telmo en uno de los destinos preferidos en las islas Canarias, haciendo de él un lugar apetecible incluso cuando en otros puntos del Atlántico la entrada al agua se hace cuesta arriba.
Ideas rápidas para acertar con la fecha:
- Mejores meses para mar tranquilo: finales de primavera y comienzos de otoño.
- Para ver puestas intensas y cielos cambiantes: octubre y noviembre.
- Si prefieres ambiente festivo y mucha vida en la calle: julio y agosto.
Naturaleza entre la lava y la espuma
La mezcla de rocas volcánicas, arena negra y agua templada crea un microcosmos marino que sorprende a quien bucea con máscara y tubo a ras de orilla. Entre los huecos del basalto asoman pulpos y pequeños crustáceos, y sobre el fondo se mueven peces tropicales como el pez loro canario o el pez trompeta. No es raro ver bancos de chicharros que se arriman a la costa. En verano, con suerte y paciencia, se reportan avistamientos de tortuga boba en aguas cercanas.
La tierra también muestra su carácter. En jardines y laderas expuestas destacan especies adaptadas a la sequía, como el drago, el cardón canario y los tajinastes. Sobrevolando el litoral aparece el cernícalo, y en los parques del casco se escuchan con frecuencia las aves típicas del norte de la isla.
La clave está en mirar despacio. San Telmo es un lugar para sentarse en el muro del paseo y ver cómo la luz cambia la textura de la lava a lo largo del día, mientras se disfruta también de las actividades que enriquecen este destino de turismo en Canarias.
La huella de la historia junto al mar
El Puerto de la Cruz fue puerto de salida del Valle de La Orotava desde el siglo XVI y conserva un patrimonio único. Paseando desde San Telmo hacia el oeste aparece la Casa de la Real Aduana, edificio civil del XVII con galerías de madera que recuerda el pasado comercial. Hacia el interior se alza la Iglesia de Nuestra Señora de la Peña de Francia, que guarda imágenes muy queridas, entre ellas la Virgen del Carmen y el Gran Poder de Dios.
En la línea de costa, el Castillo de San Felipe, con planta pentagonal, habla de tiempos de corsarios. En su entorno, el Peñón del Fraile se asocia a leyendas de devoción popular. Y como corazón urbano, la Plaza del Charco, con su fuente llegada desde Cuba en el siglo XIX, late día y noche entre bares, familias y músicos callejeros.
San Telmo tiene su capítulo propio en esa historia. La pequeña ermita alzada por frailes dominicos a comienzos del XVII ardió en 1778. Los mareantes del Puerto, conscientes de que las olas alcanzaban la capilla, decidieron reconstruirla algo más arriba y más segura, con un gesto que todavía emociona: acordaron aportar el 1.5 % de sus ingresos para costear la obra y volver a levantar el santuario en 178. Ese esfuerzo colectivo consolidó una devoción marinera que aún hoy se respira los días de fiesta.
Propuesta de paseo patrimonial desde la playa:
- Mirador de San Telmo y ermita
- Tramo del paseo hacia la Casa de la Real Aduana
- Plaza del Charco y calles del conjunto histórico
- Ruta costera hacia el Castillo de San Felipe
- Atardecer desde el paseo, con el Teide recortado al fondo si el día está claro
Fiestas que llenan de vida el litoral
La agenda local es intensa y auténtica. Hay semanas en las que los balcones se engalanan, otras en las que las máscaras toman el centro y otras en las que la Virgen del Carmen sale al mar entre sirenas de barcos y pañuelos al viento.
- Carnaval: uno de los más vivos de Tenerife. Se eligen reinas, se celebran cabalgatas y no falta el emotivo “entierro de la Sardina”. Llama la atención la carrera “Mascarita, ponte el tacón”, pura mezcla de humor y habilidad, y el ritual de “matar la culebra” de raíz afrocubana que forma parte del ADN portuense.
- Cruces de Mayo: el día 3 la ciudad amanece tapizada de flores. Capillas y calles lucen cruces enramadas, con misas solemnes y procesiones que atraviesan el centro histórico. Una tradición que une barrios y generaciones.
- Grandes Fiestas de Julio: un mes entero dedicado al Gran Poder de Dios, la Virgen del Carmen y San Telmo. Misas, procesiones terrestres y la esperada procesión marítima con la Virgen a bordo, romerías, verbenas, bailes folclóricos y conciertos al aire libre. El Puerto vibra y la costa se convierte en un escenario inolvidable para el turismo en Canarias.
Si te coincide la visita con cualquiera de estos momentos, reserva tiempo. La calle es la protagonista y San Telmo —con sus múltiples actividades en San Telmo— se muestra como balcón privilegiado sobre algunas de las mejores playas de Canarias para vivirlo.


