San Cristóbal de La Laguna: Historia Viva de Tenerife
fue la primera capital de la isla

Casco histórico: patrimonio y cultura de La Laguna
La Laguna respira historia en cada esquina. San Cristóbal de la Laguna, epicentro de historia local y de patrimonio de la humanidad, se muestra con orgullo, y quien cruza sus calles rectilíneas percibe una ciudad que, sin perder el pulso cotidiano, conserva la huella de un trazado que cambió la forma de fundar urbes a ambos lados del Atlántico. Fue la primera capital de Tenerife y sigue siendo un centro vivo, universitario y creativo, tal como se vive hoy en San Cristóbal de la Laguna. Además, sus fuentes y aljibes manifiestan la importancia del agua en su desarrollo, recordándonos la fusión de elementos naturales y urbanos que caracterizan a las islas Canarias.
De Aguere a ciudad abierta: el trazado que cambió el Atlántico
La fundación de 1497, sobre la antigua laguna que dio nombre al lugar, marcó un giro respecto a las ciudades medievales amuralladas. San Cristóbal de la Laguna se concibió como ciudad abierta, de calles anchas y rectas, con plazas donde el espacio público organiza la vida civil y religiosa. A partir de 1502, la Ciudad Baja adoptó un plan ortogonal acorde a los ideales del Renacimiento: simetría, racionalidad, ejes visuales, una red de Calles Reales conectando plazas.
La Plaza del Adelantado y la Calle Carrera fijaron un orden que aún se lee con facilidad en la morfología del centro. Ese damero temprano se convirtió en referencia para muchas fundaciones americanas. Panamá Viejo, la vieja Santo Domingo, Santa Fe la Vieja o la Ciudad Vieja salvadoreña comparten principios de organización: plaza central que reúne poder civil y religioso, trama regular que facilita administración y comercio, solares asignados según jerarquías sociales.
El gran acierto radicó en que San Cristóbal de la Laguna nació sin murallas, como “ciudad-territorio” ideal renacentista. El modelo viajó, se adaptó a climas y relieves, y se convirtió en un patrón flexible: en valles andinos se ajustaron pendientes, en climas cálidos se incorporaron portales sombreados, en zonas expuestas se añadieron elementos defensivos. La matriz, sin embargo, seguía siendo legible.
Pequeño resumen del modelo lagunero:
- Ideales renacentistas: orden, racionalidad, apertura
- Ejes urbanos: plazas, Calles Reales, visión axial
- Organización social: plaza como centro político, religioso y económico
- Proyección atlántica: guía conceptual para fundaciones hispanoamericanas
Cronología esencial del casco
| Aspecto | Fecha/rasgo | Huella en la ciudad |
|---|---|---|
| Fundación | 1497 | Capital original de Tenerife |
| Damero planificado | desde 1502 | Ciudad Baja ortogonal, Calles Reales |
| Ciudad Alta | crecimiento espontáneo | Entorno de la iglesia matriz |
| Reconocimiento UNESCO | 1999 | Patrimonio de la Humanidad |
| Superficie protegida | aprox. 60 ha | Trama histórica compacta |
Un museo urbano: templos, palacios y casas de patios
Pasear por La Laguna es encontrarse con un catálogo de arquitectura canaria y con ejemplos excepcionales de la arquitectura de San Cristóbal de la Laguna. La Iglesia de la Concepción, de 1511, resume bien la mezcla de tradición y mestizaje artístico: torre-mirador, artesonados mudéjares y materiales locales, donde el juego de luces y el agua que recoge la lluvia realzan sus detalles. A poca distancia, la Catedral de los Remedios, de imagen neoclásica y corazón gótico, recuerda la evolución artística de la isla entre los siglos.
La nobleza dejó palacios y casas solariegas que aún marcan fachadas y patios: el Palacio de Nava, con barroco canario de piedra visible; la Casa de los Capitanes Generales, pieza clave de gobierno; la Casa Lercaro, hoy Museo de Historia y Antropología; la Casa Salazar; el Casino, antigua residencia decimonónica con lenguaje ecléctico. El conjunto, con más de 600 tipologías de vivienda de tradición mudéjar hispano-portuguesa, luce balcones de madera, patios luminosos con galerías, traspatios con aljibes y carpinterías que artesanos locales mantienen con oficio, reflejo de la intensa historia local de San Cristóbal de la Laguna.
Estas arquitecturas no son mera decoración. Son la memoria material de la ciudad. Archivos, bibliotecas, colecciones sacras y civiles dan contexto a retablos, portadas y rejerías. Y muchas iglesias siguen activas, con música sacra, conciertos y cultos que envuelven al visitante en una experiencia que va más allá de la mera contemplación.
Vida cultural y universitaria: motor que no descansa
La Universidad de La Laguna, activa desde el siglo XIX y fundada oficialmente en 1792, imprime un carácter propio a la ciudad y a San Cristóbal de la Laguna. Cerca de 23.000 estudiantes, más de 1.600 docentes e investigadores y equipos de gestión generan un ecosistema de ideas, cafeterías llenas, librerías, residencias y laboratorios culturales. El Paraninfo acoge conciertos, teatro, conferencias y ciclos; las Aulas y Cátedras Culturales organizan debates, talleres de patrimonio y programas de literatura y filosofía; los coros, tunas y grupos de teatro universitarios animan plazas y festivales.
El impacto económico es tangible: por cada euro invertido en la ULL se generan 3,85 euros en bienes y servicios insulares, lo que vincula la economía local a la vitalidad de San Cristóbal de la Laguna. Cada millón de gasto público universitario sustenta decenas de empleos de calidad, con salarios que arrastran consumo local en comercio, hostelería, vivienda y cultura. A esto se suman congresos científicos, estancias de profesorado, viajes de estudio, ferias y citas editoriales que llenan hoteles, restaurantes y salas de actos durante todo el año.
- Teatro Paraninfo: música de cámara, teatro universitario y conferencias
- Exposiciones abiertas al público en el Edificio Central
- Ciclos ULL-Debates sobre ciudad, vivienda e innovación
- Premios y concursos en artes escénicas, literatura, cine y fotografía
Fiestas que vertebran la ciudad
La agenda lagunera combina devoción y calle. Septiembre es sinónimo del Santísimo Cristo de La Laguna, con procesiones solemnes, actos institucionales y la esperada exhibición pirotécnica al atardecer, visible desde medio municipio. Julio trae la Romería de San Benito Abad, de raíz agrícola y origen en el siglo XVI. Carretas engalanadas, trajes tradicionales, música, danzas y ofrendas de productos del campo reúnen generaciones en torno a la gratitud por la cosecha.
La Semana Santa llena el casco histórico de pasos y saetas, mientras que el Carnaval lagunero, con murgas y comparsas, se reconoce por su ironía y humor. El Corpus tiñe de color las calles con alfombras florales, y la Virgen de los Remedios convoca a vecinos y visitantes en octubre.
Cambios recientes han reforzado la seguridad de las hogueras de San Juan, facilitado el transporte en jornadas de gran afluencia y abierto la difusión digital de actos, incluyendo el uso de webcams en directo que permiten apreciar el ambiente festivo de San Cristóbal de la Laguna. La tradición se adapta sin perder identidad: los jóvenes aprenden bailes y cantos de los mayores, las cofradías organizan juventudes y el vecindario asume tareas de logística, limpieza y conservación.
Pequeña guía para no perderse:
- Procesión del Cristo, 14 de septiembre
- Romería de San Benito, segundo domingo de julio
- Semana Santa en el casco histórico
- Corpus y sus alfombras florales
Naturaleza cercana: Anaga, Bajamar y Punta del Hidalgo
La Laguna es un balcón sobre Anaga. A pocos minutos, la laurisilva se abre en senderos que parten de Jardina, se asoman a Taganana y rematan en playas abruptas. En la costa del municipio, Bajamar y Punta del Hidalgo regalan piscinas naturales, paseos frente al mar y atardeceres de postal, enmarcados en el inconfundible entorno de las playas de Canarias. Quien prefiera verlo antes de ir tiene a mano estas cámaras y recursos: Aeropuerto del Norte, Bajamar, Punta del Hidalgo.
Su posición estratégica permite combinar en una misma estancia cultura y océano. Santa Cruz de Tenerife queda a un tranvía: Plaza de España, Las Teresitas, y para espíritus más salvajes, la playa de Benijo.
Ideas rápidas:
- Sendero de los Sentidos y mirador de Jardina
- Baño en las piscinas de Bajamar, paseo hasta el faro de Punta del Hidalgo
- Surf y pesca deportiva en la costa norte
- Degustación de queso, vino y repostería tradicional en mercados y tascas


